Qué ver en Alcalá del Júcar
Castillo y casco antiguo
En lo alto del cerro, el castillo árabe vigila el valle desde hace siglos. Subir hasta él es recorrer la historia entre callejuelas estrechas y fachadas blancas. Desde arriba, las vistas del cañón y del río te dejarán sin palabras.
El río Júcar y sus alrededores
El entorno invita a caminar, hacer rutas o simplemente sentarte a mirar cómo pasa el agua. En verano, las zonas de baño y los pequeños embarcaderos se llenan de vida, sin perder la calma que hace tan especial este rincón.
Las cuevas y el Puente Romano
Las cuevas excavadas en la roca —como las del Diablo, Garadén o Masagó— son parte del alma de Alcalá. Y justo al pie del pueblo, el Puente Romano une pasado y presente: un lugar perfecto para cruzar el río o disfrutar del sonido del agua.
Cielos Starlight
Cuando cae la noche, llega la magia. Alcalá del Júcar es Destino Starlight, un lugar ideal para contemplar las estrellas gracias a su baja contaminación lumínica. Desde los miradores o incluso desde tu terraza, podrás ver el cielo como pocas veces lo has visto.
Cultura, gastronomía y pueblos cercanos
Completa tu visita con los sabores de la tierra: vinos de La Manchuela, miel, aceite y cocina tradicional. Y si tienes tiempo, explora los pueblos vecinos: Jorquera, Casas del Cerro o Las Eras, cada uno con su encanto rural y hospitalidad manchega.
Una experiencia que nace de la tierra, la luz y el cielo.